El terrorismo de origen marxista que asoló a nuestra patria en la década del 70, a través de distintas organizaciones armadas como el ERP, Montoneros, FAR, etc, tuvo su correspondencia en las tierras de Artigas, de la mano del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros.
Unos y otros, de este y aquel lado del río, apelaron a la violencia para tomar el poder e imponer a sangre y fuego el paraíso socialista.
Alentados, apoyados e incentivados por la Cuba de Fidel, en aquellos tiempos trágicos, los erpianos de Argentina, los tupamaros del Uruguay, los miristas de Chile y los del ELN de Bolivia conformaron la Junta Coordinadora Revolucionaria (JCR) para integrar las acciones de Guerra Revolucionaria en el Cono Sur de Latinoaméricca.
Cabe destacar, que el actual subsecretario de Promoción y Protección de Derechos Humanos de Argentina, Rodolfo Mattarollo, llegó a desempeñarse como titular de esta organización terrorista internacional.
Pero el dolor del presente también nos une a los hermanos uruguayos, porque el odio y el resentimiento montonero, que sufrimos los argentinos, se identifica plenamente con el revanchismo tupamaro que sufren nuestros hermanos de la banda oriental.
La utilización e instrumentación de la justicia por parte de los derrotados del ayer, es la estrategia que unifica en la actualidad a los que en el pasado conformaron la Junta Coordinadora Revolucionaria.
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Nuestras felicitaciones al grupo “Unidos por la Libertad de los Prisioneros Políticos - Uruguay 2006”.
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